No ha resultado fácil formar un equipo
de JPIC-CONFRECOR. Se han lanzado bastantes invitaciones, por correos
electrónicos, por mensajes en asambleas y reuniones. La respuesta, por ahora es débil. Sí contamos con un grupito
de unas cinco congregaciones interesadas, sobre todo de religiosas mujeres.
Diríamos al iniciar hoy una nueva directiva de CONFRECOR que esta sigue siendo
una tarea pendiente. Las causas pueden ser muchas de esta lentitud de
respuestas. Formamos parte de congregaciones con grandes estructuras y tareas
muy institucionalizadas. Somos reflejo también de una Iglesia muy instalada en
un clericalismo fuerte, con dificultad a la hora de ser una iglesia en salida,
en conversión pastoral como parte de la era Francisco.
Hemos mantenido viva la inquietud por las causas de JPIC en retiros,
Asambleas, reuniones de JPIC.
Hemos
realizado un retiro para formandos y formandas con una buena participación y con gran interés de los jóvenes para
incluir en su proceso formativo las causas de JPIC. El tema principal fue la
Espiritualidad de JPIC, para ayudar a comprender que no se trata de simples
acciones puntuales, sino que incluye un fuerte espiritualidad profética y una
actualización de nuestros carismas congregacionales a la hora de responder a
los signos de los tiempos
En Febrero una reunión especial de JPIC con la invitación a
la Hermana Soledad (Comboniana) presente en los Foro sociales mundiales a
hablarnos de este foro alternativo mundial a las Naciones Unidas.
Vigilia del martirio de Monseñor Romero en el parque central
de san José con presencia de bastantes religiosas.
G E
S T O P R O F É T I C O
Mensaje dirigido por JPIC a todas las congregaciones con
ocasión del año de la Vida consagrada, invitándolas a realizar un gesto
profético inter-congregacional. He aquí
el Mensaje:
H A C I A U N G E S T O
P R O F É T I C O
I N T E R C O N G R E G A C I O N A L
EN EL AÑO DE LA V I
D A C O N S A G R A D A
Hermanas y hermanos de CONFRECOR,
testigos del absoluto de Dios siguiendo al Jesús de los evangelios, el equipo
de JPIC (Justicia Paz e Integridad de la Creación), secundando una sugerencia
de la Directiva de nuestra confederación de religiosos nos dirigimos a ustedes
en el marco del Año de la Vida Consagrada para hacerles una propuesta.
El Papa Francisco nos pide despertar al mundo y salir hacia las
periferias geográficas y existenciales. Nada mejor que hacerlo con algún gesto
profético intercongregacional.
Con humildad y sencillez nos dirigimos a ustedes, a todas las
comunidades que, con los diferentes carismas
enriquecen el rostro de la iglesia costarricense, para lanzar una acción
concreta a ser discernida en oración, en consulta comunitaria y en asamblea de
CONFRECOR.
Nos referimos a la creación de un equipo
intercongregacional de religiosas y religiosos que nos ofrezcamos a la Iglesia
local para apoyar y acompañar el proyecto de las CAPs (Comunidades de
acompañamiento prioritario) y que son las comunidades que viven en los
precarios, zonas marginales o tugurios de la GAM (Gran Área
metropolitana). En una palabra: las comunidades que sobreviven en las
periferias geográficas de nuestra ciudad y nación.
Desde hace más de 3 años y, a través de la VEPS, (Vicaría episcopal de
pastoral social) está en marcha un proyecto coordinado por el P. Carlos Castro
y que abarca hasta el momento a 18 parroquias. Este proyecto pastoral intenta
un acercamiento real a las periferias, donde viven la mayoría migrantes, para suscitar y animar
comunidades cristianas abiertas al
diálogo ecuménico y comprometidas con una convivencia barrial digna y caminar
hacia la creció de una red de comunidades, algo así como un nuevo sujeto
eclesial y popular que tenga voz propia en la sociedad y en la Iglesia.
No hay duda que el huracán del Espíritu que significa el Papa Francisco
nos da fuerza y motivación para seguir adelante con este proyecto. Todo el
tiempo el Papa nos está invitando a convertirnos en una iglesia en salida.
Basta leer con atención la Exhortación la Alegría del Evangelio. El mismo
Francisco cuando todavía era cardenal fue escogido para dar un mensaje a los
cardenales en la semana del cónclave donde salió elegido. Allí aseguraba lo
siguiente: “La Iglesia está enferma en una especie de narcisismo teológico y lo
que es peor de vanidad espiritual. El antídoto es: ir más allá de los límites
de las estructuras de la Iglesia y viajar a las periferias, las geográficas y
las existenciales”
Eso mismo decía con fuerza
la Asamblea de Aparecida: ”La Iglesia
necesita una fuerte conmoción que le impida instalarse en la comodidad y en la
tibieza, al margen del sufrimiento de los pobres del Continente” (AP 362)
Por su lado la CLAR en su asamblea XIX celebrada en Bogotá en este mes
de Junio pasado habló de los HORIZONTES DE NOVEDAD de la VC, y en el punto 4
afirma: “siendo creíbles por una pobreza sincera, por una inserción solidaria en
medio de los empobrecidos, en el seno de las periferias como son migrantes,
afroamericanos, indígenas”
Y en el Mensaje final de la XLIII de
la asamblea de la conferencia de religiosos de Mesoamérica celebrado hace poso
días en nuestra patria nos pide “Una vida consagrada que busca la “inter-congregacionalidad”
… el trabajo de JPIC para saciar juntos el hambre y sed de justicia”
Estamos hablando de un gesto profético concreto inter-congregacional
para despertar no solo al mundo sino a la misma iglesia y hasta la misma vida consagrada haciéndonos
presentes en la vida de las periferias donde no solo hay problemas de
violencia, hacinamiento, drogas, pobreza extrema, sino sobre todo:
creatividad, compromiso, sueños de una vida digna, organizaciones de mujeres,
de jóvenes de niños y niñas, Comedores infantiles, experiencias ecuménicas etc.
Sus hermanos/as
EQUPO DE JPIC
San José (2 de Agosto del 2015)
Gesto profético en el
Triángulo de la Solidaridad con la proclama oficial del Manifiesto de la Vida
consagrada en su Año, con una gran participación de muchas congregaciones.